Una de las tradiciones que más me gustan de la Navidad es la de preparar un detallito con gusto para las profesoras de mis hijos. Cuando llegan estas fechas, pues, tengo: dos hijos, seis profesoras, y un reto. Mejor dicho, un desafío creativo en el que me encanta implicarme personalmente hasta conseguir el regalo perfecto.
Para hacerlo, no me complico mucho porque sé bastante bien lo que quiero y dónde encontrarlo. Mi regalo perfecto debe cumplir, a la fuerza, estas premisas: ser dulce, ser chic, y no ser excesivamente caro. Es decir, debe tener una presentación excelente y customizada al puro estilo DIY («do it yourself») -ahí participo yo- y, además, debe estar concebido contemplando las tendencias gourmet tanto en producto como en presentación.
Para conseguir todas estas cosas voy siempre a Dehesa de Solana. Casi todo el mundo sabe que son productores de jamones e ibéricos, y que tienen una línea de catering, pero no tanta gente conoce su faceta de pastelería y elaboración de regalos, salvo que vivas por la zona de Gaztambide o en Montecarmelo, en cuyo caso es probable que hayas oído hablar de Elsa y de sus manitas de oro para montar escaparates y todos esos detalles ideales, perfectos para cualquier ocasión que se te pueda ocurrir: para el cumpleaños de tu suegra, para el día del padre, para visitar a tu cuñado, para el amigo invisible, para tu propia madre… Y, cómo no, ¡para las profesoras del cole!
El protocolo es siempre el mismo:
-Elsa, tengo que hacer los regalitos para las profes. Ve pensando en algo.- Un par de días después vuelvo por allí y Elsa, que ya me conoce, empieza a desplegar medios para ponernos manos a la obra, puesto que sabe que nos va a llevar un rato. ¡Soy una cliente muy exigente y no me vale cualquier cosita! Ella me da ideas a mí; yo le doy ideas a ella; ella monta algo; yo se lo desmonto; yo estropeo un lazo, ella lo arregla… Y así, entre las dos, ¡conseguimos el regalo perfecto!




He resuelto mis regalos por 12 euros (las cestitas) y 10 euros (las jars), así que me voy muy contenta. Por supuesto que me podía haber gastado menos y siempre hay tiempo para comprar un formato pequeño de Ferrero Roché o una Caja Roja. Pero… ¡Estaréis de acuerdo en que no es lo mismo!
¡¡¡ Feliz Navidad y felices compras!!! Os dejo el link a Dehesa de Solana, que tiene varias tiendas en Madrid, pero las pastelerías están en Montecarmelo y en Gaztambide, para esos detalles de last minute.
http://www.dehesadesolana.es/tiendas