Patricia Peyró @madridmuychic
¿Buscas un sitio chulo para cenar? ¿O quizá prefieres un sitio para un afterwork sofisticado con aires neoyorkinos…? Cualquiera de las dos cosas es posible en una de las zonas más bonitas del barrio de Salamanca, y muy próxima al Retiro.
Diferentes ambientes en un local ambientado en la ciudad de Nueva York
Hace un par de semanas tuve ocasión de ir a West 42nd. A pesar de llevar poco tiempo abierto, ya está sonando mucho y se ha posicionado como local de tendencia con su interesante propuesta de maridar platos con una excelente cocktelería de autor, basada en los tragos “inolvidables” más internacionales como el Bloody Mary, el Cosmopolitan o el Dry Martini, pero también algunos nacionales, como nuestro clásico Martínez.
El valor añadido de su cocktelería es que en que todas las bebidas introducen pequeñas variantes respecto al original, dándole ese toque mágico e incluso magistral aportado por la personalidad de su mixologist Carmine Sesto quien, mano a mano con el chef ejecutivo Jeremy Levy, consigue recrear todas esas bebidas interesantes y sofisticadas que le hacen a uno viajar a la Gran Manzana, gracias a la decoración del local.
A los cócteles más inolvidables se les da un toque de personalidad
West 42nd es, en realidad, lo que se denomina un Concept Bar, siendo su concepto el de generar parejas de hecho entre la bebida y unos platos modernos y muy del gusto actual, perfectos para compartir en plan informal, pero sin mermarle calidad a las elaboraciones.
Aunque también es posible ir a desayunar, a comer, o incluso a merendar un café con tarta, para mí su principal activo es la triple combinación de Nueva York, cocktelería y comida sexy… ¡Una bomba para una cita ideal!
Platos con guiños asiáticos e ideales para compartir, en forma de Bao Buns y Saam de verduras.
Mi consejo, sin duda, es ir bien acompañado y dejarse llevar por unos platos muy bien maridados que entran por los ojos y no defraudan.
El tartar de gambón en West 42nd: Shichimi, cítricos y emulsión de su corral
Esto es un «Maujito»: cerveza, lima, azúcar, hierbabuena y tabasco. ¿A qué te recuerda?
Los lingotes de cordero asado fueron lo que más me gustó de la carta: se preparan con reducción de su jugo, hummus de remolacha y chutney de zanahorias especiadas. ¿Lo mejor? Tomarlo con el Bourbon Apple.
C/ Lagasca, 11
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