

@virginiamuychic
Cuando se trata de mi relación con la comida japonesa partimos de una persona que se ha recorrido 11 mil km para hacer gastro-turismo en el mismo Japón, así que no estoy dispuesta a perderme ninguna novedad nipona y prometedora dentro de Madrid, ¡y menos si me queda a 10 minutos en coche!
Rauda y veloz me encamino hacia la calle Alcalá en la zona de Salamanca, a probar Maitake, 100% nuevo y prácticamente a estrenar. Me han hablado bien, y me gusta nada más entrar. Se ve que tiene personalidad propia: aún manteniendo una estética minimal como manda lo japo, tiene toques que lo hacen especial y con mucha energía positiva.
Como siempre, he reservado en el sushi bar porque no hay nada que me guste más que ver cómo preparan cada plato: el mimo, los detalles , las proporciones… ¡Se me hace la boca agua!
El aire minimalista con toques escandinavos que me conquista en la entrada continúa gustándome con una vajilla de loza bien seleccionada que juega con distintos colores y texturas.

Tiene un menú amplio pero no agotador, bien estructurado y con platos tradicionales con toque fusión. Además, en algunos platos te dan la posibilidad de pedir medias raciones y así poder probar más cosas. Esto es un plus importante.

Para empezar nos pedimos una refrescante ensalada de algas con pepino y un toque de limón.
El plato que más me gustó fue el tiradito de pez mantequilla con paté de trufa negra. Estaba de muerte… ¡Me podría haber comido 10 más!

El tartar de salmón con huevas y aguacate cortado a cuchillo era estupendo.
Aunque me gusta el tempura soy mucho mas de crudo, pero tengo que reconocer que no me pude resistir a probar el roll de tempura de langostinos con aguacate y hoja de roble.

Antes de seguir, tengo que hacer una confesión: con la excusa que un buen japonés se reconoce por la calidad de su toro y porque tengo debilidad por la ventresca, aproveché y lo pedí en todas sus variedades.
El nigiri de toro: ¡espectacular! Calidad top, mirad qué color y qué vetas!
El gunkan de toro de toro picado con salsa picante muy bueno y bien presentado.
Y para acabar, mi favorito entre todos los sabores del mundo: helado de matcha (y eso viniendo de una ex propietaria de heladería vale por lo menos doble…)
Mi recomendación es que no te pierdas la experiencia. Reserva ya! Antes de que se ponga tan de moda que haya que esperar un mes para conseguir mesa…
Alcalá, 105
Madrid
Tlf. 91 576 83 74
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